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Poemas Grito de Mujer 2014 Málaga España

Poemas Festival Internacional de Poesía Grito de Mujer 2014 en Málaga España, coordinadora Rosa Garde Nicolas con apyo de Gems, Red Mariposa y Amnistía Internacional.







Miguel Ángel García

Poema  sin  atributos
A Laura.


Ser árbol, nube, viento…
Ser las olas del mar en movimiento,
Verde hierba, suave brisa, azul cielo,
Alegría infinita sin objeto,
Gozo de instante,
En el momento.

Fluir con la vida…
Recordar tu beso…

Abandonar todo credo,
Abrir, para sanar, las heridas,
Abrazar el mundo entero.

Ser Sol, Luna, estrellas…
Universo, al fin, verdadero.

Sentir la sangre palpitar en las sienes
Al galope y ritmo de un corazón lento.

Ser niño, anciano,
Rico, pobre,
Sabio y necio.

Reírse del diablo y de todos los
Tormentos del infierno.

No ver en los otros mal ni pecado…
Apostar por entregarse entero al
Primero que pase junto a tu lado.

Ser pájaro no enjaulado,
Solitario, feliz, libre, sin cuidados.

Ser vida eterna
En el instante que ya muere.

Ser negro mineral,
Entrañable,
Roca inerte.

Ser el recuerdo de un
Encuentro breve.

Ser hoja caída,
Sentimiento que muere.

Ser frágil hiedra,
Liviana enredadera,
Extraña flor que te ha trepado.

Caballero sin caballo,
Enemigo de molinos de viento y
Dragones imaginarios.

Ser tu bebé no-nacido,
Futuro incierto,
Lo aún no-vivido.

Ser infinitos puntos en uno.

Ser Tú.

Ser amable…
Dejar que la ternura
Te alcance…
Que la tristeza te hiera…
Llorar ante tanta belleza insoportable…

Querer expresar lo
Inexpresable.
No saber quién eres y no
Importarte.

Ser Todo y que… ¡no te espante!
Ser Nada y que… ¡te sobre!



María Ramos

"des-mito, ego te absolvo"


El romanticismo es una mentira

Si me vas a querer,
omite la parte que a mis ojos corresponde,
obvia las curvas que por naturaleza heredé,
deja de pensar en mis labios,
sin son besables o deseables,
deja las caricias de tus manos a un lado
y no me toques el vestido.
Si vas a quererme que sepas
que te cedo parte de mi espacio y de mi sombra,
que quien soy se gesta en ese punto intermedio
entre las sinapsis de mis neuronas,
los bombeos de mi diástole
y las convulsiones de mis vísceras,
que hubo mil historias antes que tú,
y tú no serás eterno,
ni yo.
Acepta que la cesión de una parte
no es la entrega del todo,
que la vulnerabilidad, las hormonas y el afecto
serán diferentes a los tuyos,
que mis creencias son producto
de dolorosos razonamientos de supervivencia
Y siempre, siempre, seremos distintos,
individualmente completos
y llenos de errores por enmendar.
Si es así que me quieres,
empecemos a hablar.


Matilde Gálvez

Pasión ciega

Porque el amor- pasión hace su entrada.
se aliena, se elucubra, se entontece,
perdida la conciencia, se adormece,
la mente desvaría obnubilada.

Cuando el amor-pasión te tiene atada,
se sufre, se alucina, se padece,
se nubla la razón y se entorpece.
Tu carne se torna incontrolada

Es el deseo carnal quien te aprisiona,
te enreda y te destruye el pensamiento,
llevándose tu lógica y cordura,

 pues manda el corazón en tu persona,
y esclaviza tu vida al sentimiento,
sumiéndote en caótica locura.

No quieras ese amor de siniestra tiranía,
porque el amor es ternura, placer y armonía.



Guadalupe Eichelbaum Sánchez

 Tres mujeres A Ana Crespillo y a May

(Los minutos dorados no abundan en la vida, no hay que estar desprevenida. A éste lo he visto, lo he mirado, ingerido, captado, saboreado.)
 

Hemos renacido
siendo las mismas
somos otras.

Tenemos alas
en nuestras espaldas
puede que tengamos
miedo a volar,
que torpes seamos
pero tenemos alas.

El aire está
recién planchado
a nuestro alrededor.

Nuestras almas exhalan
delicado perfume
puede que sea simplemente,
la amistad, sin más.
Somos las mismas
siendo otras.
La tristeza es alegre.
Hemos andado
muchos meses y años
para llegar al día
que es hoy.

Nuestras piernas nos sostienen
con firmeza labrada
a pulso, a sudor
y a lágrimas.
Ahora somos más nosotras.
Árboles frondosos
y esbeltos, nos alzamos
hacia el cielo
nuestros pies toman savia
de la tierra que pisan.
Somos tres mujeres.



Mª Jesús Campos


Mariposa y colores


Despliega
sus alas
la mariposa,
vistiendo
de color
el azul celeste del cielo.
Y es su vuelo
como alma blanca,
el despertar
de un sueño.
Bajo los pinos
verdes
se asoman
aromas nuevos,
y un manto negro
de sombras
anda al acecho.
Abanicos
de navajas,
empujados
por el viento.
Se abre
amarillo,
el horizonte incierto,
y sin encontrar
nubes rosas
que le den juego,
se pierde
el sol
frente al naranja
intenso.

¡Cuánto le duelen
sus besos!
Tanto, que sangra
de rojo pasión
el ocre
de los campos
yermos.

                       


Margarita Souviron

Palabras en silencio


Voy a decir que no hay que decir nada
cuando las injusticias se evaporan,
solo el silencio es suficiente y suena:
Una niña ha crecido libre y alta,
nadie le roba nada a su salario,
puede criar con tiempo a cada hijo,
sabe pensar con luz entre sus ojos
y decide qué hacer con su futuro.
La ropa que la cubre no la tapa,
el cuerpo que la asiste es aceptado,
tiene un cerebro gris tras su mirada
y un alma transparente entre sus pechos.
Madre, hija o esposa, es digna y sabia,
se respeta a sí misma y es respetada,
una raza con otra solo distingue
el color de una piel o una  estatura.
Una espada por fin rompe su hoja
y reluce la paz sin los decretos,
la libertad no entiende de diferencias,
hombre y mujer caminan del mismo lado.    


Nerea aznar

Me estoy haciendo vieja


Me estoy haciendo vieja
sólo treinta y dos años
              y tos tuberculosa
de infinitos cigarros
me mareo en los bares
y no soporto el vaho
ni el ruido de los cuerpos
que bailan hacinados.
Me estoy haciendo vieja
¿llegarás a algún lado?
Te estás haciendo vieja.
Espejo sin engaño
vocablos obsoletos
palabras que hacen daño
tu moral anticuada
¡oídme!, ¡hacedme caso!
suplico a mis amigos.
(Las canciones de moda
ya no me las conozco:
no he visto de Madonna
su nuevo video-clip.)
Y sola, como un trasto
de aquella discoteca y
su rincón olvidado,
donde ya no me besan,
(¡oídme!, ¡hacedme caso!)
no me dejéis tirada
(¡aprendo muy rápido!).
Me estoy haciendo vieja
ya gastadas mis ropas
perdieron su esplendor
y su esencia venenosa
me estoy haciendo vieja
y una carga insidiosa
¡escuchadme! ¡besadme!
Me estoy haciendo vieja.
Me estoy haciendo vieja.



Carmen Peralto


Niñas De Mandawa


Vamos sobre el barro caminando por las calles, buscando en las havelis de los mercaderes, los frescos que perduran. Nos acompaña ahora un pesado juglar con sus canciones, varios niños saltan a nuestro paso, remolinean alrededor, zumban en los oídos. Son niños pobres, niños que piden y te cuentan historias fantasiosas.


Más abajo, entre el barro y sobre el barro, pasan cogidas de la mano las dos niñas de Mandawa. Lazos azules, trenzas negras, la cartera, los cuadernos, los zapatos brillantes sobre el lodo, entre el estiércol. Van las niñas sonrientes al colegio y comienza a florecer la primavera.



Madre


Corazón abierto sin fronteras.
Agua pura. Manos limpias.
Suspiro lunar de amanecida.
Sangre cuajada de estrellas.



José A. Royuela


Qué si soy mujer


Me preguntas qué si soy mujer.
Como si no hubiese dado muestras de ello.
Como si no bastara
equilibrar los delirantes acordes de tu caminar,
ser las cuatro patas de la mesa
sobre la que se come, se sueña y se llora,
sacar las plantas al balcón para que el dióxido
no perturbe tus comas.

Como si no hubiese sido suficiente
levantarme temprano todos los días,
recoger el ancla, limpiar la casa de agujas infectadas,
maquillar el desaliento de entre mis piernas
o tener siempre a mano la miel con limón
con la que lubricar nuestras gargantas dañadas
por el desorden de las palabras.

Te recuerdo parte del equipamiento de serie que llevo:
la orografía que levanta deseo de ser coloreada,
un obrador de vida,
la sinergia de milenios de las de mi especie,
el mejor manual de supervivencia que se conoce
y un libro de recetas sobre felicidad.

Que si soy mujer, me preguntas,
y te quedas tan pancho, ¡hombres ciegos!,
apresados en su propio bienestar.


Isabel Anaya

Nuevos tiempos


Nuevos tiempos vendrán para el planeta,
en los cuales, hombres y mujeres se unan
para construir una sociedad más justa,
digna de albergar al Ser Humano,
que acabe con la lucha entre los sexos
y nos permita encontrarnos en una feliz
dualidad complementaria.

Desnudemos nuestras almas.
Mostremos nuestro auténtico Ser,
sin corazas defensivas ni artificios.

Hora es ya de compartir,
en igualdad de obligaciones y derechos,
este paraíso terrenal
que nosotros mismos nos negamos

Ofréceme tu confianza, varón a mi destinado.
No tengas miedo de mi feminidad,
pues te la ofrezco.
Yo tampoco temeré la hombría
que  me regales.

Integremos, en nuestro interior,
el lado femenino y masculino
que cada persona lleva dentro.

Nuevos tiempos vendrán para la Tierra;
los del encuentro de hombres y mujeres
sin relaciones de dominio o competencia

El futuro nos espera a que lo hagamos
No demores, mi amor, tu entrega
a la maravillosa misión

que nos ha sido encomendada.

Tiéndeme tu mano, compañero,
enlacemos las nuestras a otras manos solidarias,
de compromiso semejante.

Nuevos tiempos vendrán para el planeta.
La Tierra Prometida está en cualquier parte.
Nuestras acciones de hoy
serán la simiente de los frutos del mañana.


 

Comentarios

  1. Enhorabuena Mujeres por este Grito de Mujer Hay que hacerse ver. La emisión de la palabra es una buena forma de hacerlo.

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