Poemas Grito de Mujer 2013 Murcia España

Poemas de Grito de Mujer 2013, Murcia Ciudad. Coordinado por Isabel Ascensión M. Miralles con el apoyo de Pedro Vera embajador MPI

Isabel Ascensión M. Miralles

Mujer

Ella es reflejo tierno y persuasivo

de una especie en tránsito, en camino.

Ella es brújula e imán, sueño y canción

en el desierto de los sinsentido.

Ella es el pozo de la angustia ,

la llama del anhelo,

la plenitud del lecho,

la sombra entre las dudas.

Ella es la que esparce cuidados

en torno a lo que crece,

la que bebe en los ecos de la luna

la danza renovada  de la sangre,

la que cura al herido

y enardece al guerrero,

la que acuna a los héroes

 y les cubre de besos y de flores las sienes.

Es ella la que invierte las horas

 del reloj de este mundo,

con su rezo encendido

y su dulce palabra,

con su andar sigiloso

y sus ojos abiertos,

como abierto es el cielo al abrazo del sol.

Ella es, mujer, quien asume la noche

como símbolo pleno,

si en la noche se fragua

un destino mejor

que libere  a los pueblos,

que proclame lo humano

como el reino de todos,

 como el faro de luz

que se adentra en lo oscuro

de la historia del mundo

y renace triunfante

en un grito de amor.

El nombre Mamá

Se aprende a pronunciar su nombre

en los primeros meses de la vida,

cual si el aire y la luz lo contuvieran

en su etérea fragancia necesaria.

El agua, la salud, el movimiento,

el rapto de los ojos, la esperanza: todo es ella.

En su nombre cabe, mamá, lo imprescindible,

lo que forma parte inmediata del consuelo

que sus manos de ofrenda precipitan

en límpida cascada de bienvenidas

absolutas, profunda la raíz de su agua clara.

El nombre mamá llena la boca,

como una hogaza de pan, siempre dispuesta

a saciar con su entraña el hambre de los hijos,

el hambre física, el hambre de justicia,

el hambre de calor y de sentido.

El nombre mamá llena los ojos y las manos

con racimos de luz y abrazos soleados.

Siempre te guarda un sitio

en la cita diaria con la vida

y aunque se vaya, es el destino,

su nombre no se borra en la memoria.

Vive más adentro y es más grande

porque quema a raudales de luz

que, paulatinamente, revela  su misterio,

la incomprensible acción que ahora comprendes

y que antaño, locura la juzgaras.

Si ya no está, su nombre tiembla en tu garganta

como la gota de lluvia en cada hoja

y en ese temblor te reconoces hijo,

hijo por siempre de su eterna esencia,

de su nombre, mamá, como al principio.

Mundos de sal

Nos regalabas mundos de sal cada verano.

Nos creabas oasis en medio del desierto,

de los días amarillos.

 Libertades nos dabas y mundos de ocurrencia,

personajes de cine que eran, por azar,

nuestros vecinos, gente del montón,

con tanta historia a cuestas.

con tanta penumbra y tanta guerra,

tanta ansiedad y tanto anhelo…

¡Qué maremoto de emoción centelleante,

cántaros de vida ardiente, cual mentira

de escenario en pie!

¡Cuántos mundos existen, madre mía!

Y tú entregada a tu tienda y a tu esposo,

lejos de mi percepción del mundo y del azul

de ese mar menor que nos bañaba los sueños

y el recuerdo de ti, siempre afanado.

¡Cuántas vidas cimbradas en la espera

de un reino sin retorno,

de un imperio perdido en la inconsciencia!

Y tú, en el pueblo, luchando por los tuyos,

esos tuyos que te vería partir un día,

ausente de las brisas que tú les regalabas.

¡Cuántas almas cargadas del peso interminable

de su verdad mortal e insatisfecha!

Todo era un circo, madre,

una feria de hambrientos vagabundos,

en busca de un auténtico bocado de amor,

de paz y comprensión hasta en lo falso.

Sólo tú eras perenne y cierta,

a pesar del trabajo y la distancia.

Y también esa abuela que, con amor de madre,

nos ayudó a crecer con alegría.

Confiabas en ella y la queríamos,

pues en ella vivían las vacaciones,

los personajes nuevos, pintorescos,

las estancias fugaces,

lejos del infinito plomo cotidiano.

Ella era el hada fiel de los veranos,

la nodriza amorosa de los juegos.

Tú cultivabas soles de amanecer futuro,

laboriosas promesas de abnegación y celo

que florecían gozosas en verano,

cuando al fin nos mandabas a la playa.

Nos regalabas mundos de sal cada verano,

flores que perfumaban los inviernos sombríos,

mientras tú preparabas el fuego del hogar.

 Francisca M. Usero

Feminidad

Que en lo divino te recreas,

busca en tus entrañas, el hálito de vida

que te encumbra al Olimpo de los dioses,

reflejo de quien te engendra, día a día.

Fui a los anales del tiempo

y te hallé, en hacendosa tarea

revestida con el manto del universo…

Parías mundos de singular belleza.

¡Contemplé el esplendor de la vida!

Que de la nada surgiera.

Átomo, más átomo de amor…

Igual, a  Creación.

Ahora entiendo la grandeza

de mi mundo, y otros mundos.

¡Déjame pues deleitarme!

Y acógeme en tu regazo… Por toda la Eternidad.

Porque si Dios tuviera un nombre,

no dudaría en llamarle… "MUJER".

Para todo aquél que  siente la feminidad.

Inmaculada Pelegrín López

Habla Sofía

               

Yo soñaba una vida como otras.

Un piso en las afueras ,algunas madrugadas con amigos,

viajar al extranjero en el verano,

reírnos casi siempre

y un par de niños rubios

a quienes regalarle mis patines.

No sé en qué momento

mis sueños se volvieron en mi contra,

ni cuándo comencé

a dejarme llevar sin poner límites

o cuándo el asco suplantó al amor.

El piso en las afueras,
las cenas con amigos,

los viajes, el mercedes,

los niños, sus sonrisas,

no logran compensar tu menosprecio.

Este sabor amargo, que me deja

cada vez que me miras y me duele,

en nada se parece a lo soñado.

Algún día tendrás,
tú también, una hija
a quien darle una barra
de labios como ésta,
pues todas las mujeres de tu estirpe
han tenido la suya.

Todas menos la tía Guadalupe,
ten presente su ejemplo.

Ya sabes cómo terminó sus días...
Con la cara lavada,
en cueros y dichosa
a la luz de la luna.

 

Juan Tomás Frutos

Juguemos a vivir,

y tratemos que ese juego

nos haga felices.

Tratemos de experimentar

la mejor pasión,

la pasión más hermosa,

la que nos atrae con elementos

de gozo.

Vayamos a lo excelso

con un posicionamiento

de leyendas cumplidas

y solidarias, buenas.

Juguemos sin miedo,

aunque el amor nos aparte

de esa senda segura

que nos enseñaron.

Hoy toca jugar,

pase lo que pase.

La aventura está garantizada.

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La ocasión de una vida

Busquemos en la vida

que ofrece esperanza,

y sigamos la estela que nos plantea

lo que queremos desarrollar.

Hagamos caso a los corazones

que nos aclaran

lo posible y lo imposible

con una prevención superadora

de miedos desde el riesgo

que supone existir.

No importa el fracaso:

lo relevante es intentar

lo que nos regala felicidad

con entusiasmo y buen hacer.

Nos hemos de dar esa ocasión

que justifica la vida.

Ahí está.

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Semblanzas

Isabel Ascensión M. Miralles

Nacida en el pueblo murciano de Los Ramos. Es licenciada en Filología Hispánica, diplomada en  Ciencias de la Educación, Francés e Idiomas Modernos. Ha realizado  estudios de Medicina, Psicología y Teología, poseyendo un master universitario en Asesoramiento y Orientación familiar. Poeta, escritora y gestora cultural. Es ganadora en el Concurso Literario "Solidaridad para los Pueblos" con el poema "Un Fraterno desenlace" entre otros premios. Fundadora y presidente del Certamen Internacional de Literatura  basada en valores “Concha de luz”.

Francisca M. Usero

Nace en Murcia el 1 de Abril de 1962. Es profesora de canto por el Conservatorio  Superior de Música de Murcia.  Realizó diversos estudios de teología en el Instituto de Teología. O.F.M de Murcia. También posee el título de Magisterio Musical, por la Facultad de Educación de la Universidad de Murcia. Actualmente imparte clases de técnica vocal. Colabora muy estrechamente con la asociación "Cultura y Mujer" de Murcia. Así como en jornadas dedicadas a música y poesía de la región "AERMU."(Asociación de escritores de la región de Murcia).

Inmaculada Pelegrín López

Premio internacional de poesía Gerardo Diego 2007. Óxido (ed. Pre-textos). Trapos Sucios ed. Tres Fronteras 2008 Premio Iberoamericano de poesía Juan Ramón Jiménez 2012. Cuestión de horas (ed. La isla de Siltolá).

 

Juan Tomás Frutos

Juan Tomás de Frutos es Licenciado y Doctor en Comunicación por la Universidad Complutense de Madrid. Es Doctor en Pedagogía por la Universidad de Murcia. Está en posesión de seis másteres: en Producción en Radio y en Producción en Televisión, en Publicidad y Comunicación, en Pedagogía, en Literatura y en Antropología. Es escritor, poeta y colaborador intenso en la Asociación de Escritores de la Región de Murcia (AERMU), donde ha sido Vicepresidente. Presidente del Círculo de Historia y Cultura.